lunes, 23 de abril de 2007

Letanía


Esta indescriptible sensación de no ser

Este frío que te amordaza sin señales

No quiero preguntar dónde reposa el viento

Signos inexactos del presente en espera

Aproximarse a los vacíos

Morir de sed


Habitarme

Habitarnos


Hoy no pude evitar bendecirte

Y tras los huecos que dejan tus abrazos

Me escondí de nuevo

Como la primera vez

Me fui

A extrañarte

En silencio

Las mismas tardes las mismas tardes las mismas tardes las mismas tardes
Haciéndole frente al olvido




Habrá que ser como el Principito

Y nunca dejar de buscar las respuestas



(El ruido que deja tu ausencia me enmudece. Sólo pido que la noche me sorprenda descansando en tus orillas)

2 comentarios:

alter dijo...

Igual es tu poema, o tu poema+estar oyendo a Cat Power o Cat Power a secas pero leía tu texto y me ha emocionado.

Y no suele pasarme.

He tenido la impresión siempre de que la poesía debe, en muchos casos, bordear la cursilería sin caer nunca en ella.

Habrá quien crea que caes, yo creo que la bordeas estupendamente.

Anónimo dijo...

GRACIAS, mis 10 pesos de consulta fueron como vinieron en un mundo.
eras mi futuro, mi pasdo y mi presente.
eres quien mas me conoce, y a la vez la que mas alejada y cerca de mi esta.
si tendras razon la soledad es mala compañia, pero ya no depende de mi.